El número dos del PP denuncia el hundimiento moral y político del PSOE mientras Begoña Gómez se sienta en el banquillo. El Gobierno, acorralado, responde con acusaciones de “violencia” para silenciar las críticas.

El PP augura el final de un Gobierno podrido
El secretario general del PP, Miguel Tellado, ha lanzado un mensaje demoledor contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez: “Este curso se empezará a cavar la fosa donde reposarán los restos de un Gobierno que nunca debió existir”. Lo ha afirmado en el acto de apertura del curso político en Pamplona, donde ha señalado a Navarra como “la primera línea de batalla” frente al deterioro institucional promovido por el PSOE.
Tellado no se ha quedado en metáforas. Ha calificado al actual Gobierno como “agonizante, mendicante y arrodillado” ante prófugos, condenados por terrorismo y radicales que, a cambio de impunidad y privilegios, mantienen con vida al sanchismo.
El año judicial empieza con Begoña Gómez ante el juez
El dirigente popular ha denunciado la hipocresía del PSOE al celebrar el inicio del año judicial mientras la esposa del presidente, Begoña Gómez, se prepara para declarar ante el juez en una causa por corrupción y tráfico de influencias.
Tellado fue claro: “El verdadero acto judicial del PSOE empieza este miércoles con Begoña Gómez sentada en los juzgados”, y no con el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, inaugurando el curso judicial mientras está investigado por un “delito gravísimo”.
Navarra, laboratorio del sanchismo
Tellado ha señalado a Navarra como el campo de pruebas donde el PSOE ensayó su degeneración moral y política. Desde los escándalos de Koldo García hasta los manejos de Santos Cerdán, pasando por la complicidad de la presidenta María Chivite, “el socialismo ha podrido la vida institucional”, sentenció.
“Todo huele a podrido en el entorno de María Chivite”, afirmó Tellado, comparando a los implicados con “los Soprano”. Acusó a Chivite de ser como mínimo la “consentidora” de una trama corrupta que blanqueó a Bildu y creó el germen del Gobierno Frankenstein de Sánchez.
El Gobierno responde con victimismo y censura
Pedro Sánchez no tardó en reaccionar, acudiendo a la estrategia de siempre: hacerse la víctima. Acusó a Tellado de lanzar una “apelación encubierta a la violencia” por hablar de “cavar la fosa” del sanchismo, en una clara maniobra para desviar la atención de los escándalos judiciales que acorralan a su entorno.
El PSOE exigió a Feijóo que desautorice a Tellado, acusando al PP de “traer la política sucia” a España y de rendirse “a la ultraderecha”. Ministros como Óscar López y Óscar Puente se sumaron al coro de quejas, hablando de “odio”, “franquismo” y “vergüenza”.
Pero no hubo una sola palabra sobre Begoña Gómez sentada ante un juez, ni sobre la corrupción institucional que impregna al sanchismo.
Mientras la izquierda se rasga las vestiduras por una frase, el país entero observa cómo la esposa del presidente desfila por los juzgados, cómo se premia a separatistas, y cómo se arruina la unidad de España.
¿Quién cava fosas de verdad? ¿El que denuncia el abuso… o el que entierra la justicia bajo pactos oscuros y corrupción impune?