El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, ha instado a la comunidad internacional a mantener una postura unificada para alcanzar una “paz verdaderamente sostenible” en el marco del ultimátum que marca la fecha límite para que Rusia acepte un alto el fuego. El mensaje fue difundido el 8 de agosto a través de su canal oficial de Telegram.
“Si todos perciben las oportunidades y las amenazas de la misma manera, será posible lograr una paz duradera”, afirmó Zelenskyy en su discurso vespertino, señalando que el respaldo de los aliados llega “en nuevas condiciones” vinculadas al ultimátum anunciado.
Ataques rusos pese al ultimátum
El presidente ucraniano denunció que Moscú no ha mostrado intención de cumplir con el alto el fuego. Según detalló, en las últimas horas se registraron más de cien ataques con drones durante la noche, además de bombardeos aéreos, intensos asaltos en el frente y repetidas alertas por ataques en diversas ciudades.
Zelenskyy relató un incidente ocurrido en la región de Jersón, donde un niño de 13 años resultó herido por un explosivo lanzado desde un dron ruso. “Se trata de una destrucción deliberada de vidas. El ejército ruso no ha recibido órdenes de detenerse”, lamentó.
Contactos internacionales y medidas en discusión
En los últimos días, el mandatario ha mantenido “más de una docena” de conversaciones con jefes de Estado y de Gobierno, así como con representantes de organizaciones internacionales, con el objetivo de coordinar “medidas reales” que garanticen la seguridad y la estabilidad a largo plazo.
“Quiero dar las gracias a todos los que nos ayudan en el mundo, a todos los que contribuyen a poner fin a la guerra”, expresó Zelenskyy, subrayando que la unidad con los aliados occidentales sigue siendo un pilar clave de la estrategia ucraniana.
El presidente también mantuvo un diálogo productivo con el secretario general de la OTAN, centrado en reforzar las defensas de Ucrania ante el aumento de la presión militar rusa.
La llamada de Zelenskyy a la unidad mundial refleja no solo la urgencia de detener la guerra, sino también la necesidad de que la paz se construya sobre bases sólidas y no temporales. Sin un compromiso real de todas las partes, cualquier alto el fuego corre el riesgo de ser solo una pausa en un conflicto que ya ha dejado profundas cicatrices en Ucrania y en el orden internacional.
