Donald Trump ordena un ataque militar contra un barco cargado de drogas procedente de Venezuela y lanza una acusación directa contra el régimen de Nicolás Maduro: lo responsabiliza de patrocinar terrorismo. Además, zanja los rumores sobre su estado de salud y califica a la prensa de “fábrica de noticias falsas”.
Trump lanza un mensaje de fuerza desde la Casa Blanca
En una impactante comparecencia desde el Despacho Oval, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reveló que sus tropas han ejecutado un ataque militar directo contra una embarcación venezolana que transportaba grandes cantidades de drogas. La operación se saldó con 11 muertos, calificados como terroristas del Tren de Aragua, una organización criminal originaria de Venezuela.
“Literalmente destruimos un barco que transportaba mucha droga. Y esa droga venía de Venezuela”, sentenció Trump, visiblemente firme.
Según el mandatario, la intervención fue autorizada tras recibir información del jefe del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine, y fue posteriormente confirmada por el secretario de Estado, Marco Rubio.
“Muchas cosas están saliendo de Venezuela. Por eso eliminamos el barco”, remarcó Trump, quien acusa directamente al régimen chavista de actuar como plataforma del narcotráfico internacional.
Venezuela, en el centro del mapa del narcoterrorismo
El ataque, descrito como una operación cinética, tuvo lugar en aguas del Caribe, donde el despliegue de la Marina estadounidense ha aumentado de forma notable en las últimas semanas. El objetivo: cortar las rutas del narcotráfico y debilitar al régimen de Maduro, al que Trump ya no solo vincula con el tráfico de drogas, sino también con el terrorismo internacional.
Desde Caracas, el régimen bolivariano reaccionó tildando de “falsas” las imágenes del ataque y sugirió, sin pruebas, que podrían haber sido generadas por inteligencia artificial. Un intento más de desviar la atención ante una evidencia que ya ha circulado en medios y redes.
Trump desmiente rumores sobre su salud: “Una locura total”
La intervención de Trump también sirvió para cortar de raíz los rumores sobre un presunto deterioro de su salud. Durante los últimos días, algunos medios y cuentas anónimas habían llegado incluso a difundir su supuesta muerte.
“Son una locura. Solo porque no hice ruedas de prensa durante el fin de semana largo, ya dijeron que me pasaba algo. Noticias falsas, como siempre”, ironizó el presidente.
Además, arremetió contra la prensa por su doble vara: “A Biden no le preguntaban nada. Yo descanso un día y ya me entierran”.
Un aviso directo al chavismo y sus aliados
El mensaje de Trump no deja lugar a dudas: Estados Unidos está dispuesto a usar la fuerza militar contra el narcotráfico con base en regímenes totalitarios como el de Venezuela. El ataque al barco no es un caso aislado, sino un aviso contundente de lo que puede venir si Maduro sigue permitiendo la expansión del crimen organizado.
La acción ha elevado las tensiones diplomáticas, pero también ha sido celebrada por sectores que consideran que la mano dura es la única vía para desestabilizar las redes criminales que operan bajo la protección de algunos gobiernos de la región.
