Riadas de agua y barro anegan la ciudad costera tras lluvias torrenciales
Al menos 37 personas han muerto y varias decenas han resultado heridas por un temporal de lluvias torrenciales que azotó en la noche del domingo la ciudad costera de Safi, en el suroeste de Marruecos, según las autoridades locales.
Las fuertes precipitaciones, concentradas en apenas una hora de lluvias intensas, provocaron inundaciones repentinas que arrastraron viviendas, comercios y vehículos en esta ciudad atlántica, situada a unos 300 km al sur de Rabat y con más de 300 000 habitantes.

Balance de víctimas y daños
- 37 personas fallecidas a causa de las crecidas, según el Ministerio del Interior marroquí.
- 14 heridos han sido trasladados a hospitales, algunos de ellos en estado grave.
- Decenas de viviendas y comercios inundados y al menos 70 edificios afectados en el casco urbano.
Las lluvias también provocaron el corte de carreteras, la caída de árboles y el desplazamiento de lodos y escombros que dificultan las labores de rescate y limpieza.
Operativo de emergencia y rescate
Equipos de emergencia y Protección Civil continúan las operaciones de búsqueda, rescate y asistencia en Safi tras el desastre climático. Las autoridades han señalado la “movilización total” de recursos para auxiliar a la población y restablecer servicios básicos.
Además, las escuelas en la provincia han sido suspendidas temporalmente debido a las condiciones meteorológicas extremas y para facilitar las tareas de respuesta a la emergencia.
Contexto climático
El desastre se produce tras siete años de sequía continua en Marruecos, que ha endurecido los suelos y puede haber contribuido a que el exceso de agua superficial provocara crecidas más bruscas y destructivas.
Los residentes han compartido imágenes de calles convertidas en ríos, coches arrastrados por la corriente y zonas residenciales completamente anegadas, evidenciando la violencia con que avanzaron las aguas en poco tiempo.
Una de las peores inundaciones de la última década
Según fuentes oficiales y medios internacionales, estas inundaciones constituyen una de las tragedias más letales por tormentas en Marruecos en al menos una década, superando los balances de anteriores episodios climatológicos extremos.
Las autoridades han pedido a la población mantener la prudencia ante futuras lluvias y han advertido de que las condiciones meteorológicas podrían continuar siendo inestables en los próximos días.



