La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha confirmado la desconvocatoria de Lamine Yamal para los próximos partidos de clasificación frente a Georgia y Turquía, tras conocerse que el jugador se sometió a un tratamiento médico en el pubis sin conocimiento previo del cuerpo médico de la selección.
En un comunicado oficial, la Federación expresó su “sorpresa y malestar” por la decisión del club azulgrana, asegurando que se enteraron del procedimiento “a las 13:47 horas del lunes 10 de noviembre, día del inicio de la concentración oficial”, y que los detalles del tratamiento se comunicaron “mediante un informe recibido a las 22:40 horas de la noche”. Dicho documento recomendaba un reposo de entre 7 y 10 días, motivo por el cual se decidió liberar al futbolista “priorizando su salud y bienestar”.
Un nuevo episodio de fricción
El caso ha reavivado las tensiones entre el FC Barcelona y la RFEF, que ya habían tenido desacuerdos en meses anteriores por la gestión médica y la disponibilidad de Yamal. El delantero de 18 años, considerado una de las grandes promesas del fútbol español, no acudió a la última convocatoria por molestias en el pubis, y el club optó por un tratamiento conservador.
Sin embargo, la decisión de realizarle una radiofrecuencia el mismo día del inicio de la concentración ha sido interpretada como una falta de coordinación y lealtad institucional. En la Federación se considera que el procedimiento, aunque leve, debió comunicarse antes por respeto a los protocolos médicos conjuntos entre clubes y selecciones.
La posición del club y de la Federación
Desde el Barcelona se insiste en que el objetivo es proteger a su joven estrella, pieza clave en el proyecto deportivo del club y que sufre una pubalgia que requiere cuidados específicos. Para la entidad culé, la prioridad es su recuperación completa y evitar recaídas.
En cambio, en la RFEF el malestar es claro: no cuestionan el tratamiento, pero sí la forma en que se realizó. Fuentes cercanas aseguran que el enfado se debe a que el club actuó “de manera unilateral”, sin informar a tiempo al cuerpo médico de Luis de la Fuente, lo que trastocó los planes de la selección.
El comunicado concluye con un mensaje diplomático, aunque con tono firme:
“Confiamos en que pueda evolucionar favorablemente y le deseamos una pronta y completa recuperación”.
Un talento bajo los focos
La salud de Lamine Yamal vuelve así al centro del debate. El jugador, símbolo de la nueva generación de talentos del Barça y de la selección, atraviesa un momento decisivo en su desarrollo. La gestión de sus minutos y su recuperación será clave para evitar que este episodio afecte su progresión, tanto en el club como en el combinado nacional.
