Donald Trump ha dejado claro que ya no está interesado en reforzar militarmente a Ucrania, sino en negociar con Vladimir Putin un acuerdo de paz. Así lo manifestó tras recibir al presidente ucraniano Volodímir Zelenskiy en la Casa Blanca, en una reunión que duró más de dos horas y dejó un mensaje demoledor: Ucrania debería detener la guerra “inmediatamente”, aunque eso implique renunciar a parte de su territorio.

Trump congela el envío de misiles a Ucrania y aboga por un alto el fuego con cesión territorial. Zelenskiy se queda sin apoyo crucial mientras Putin gana tiempo y ventaja estratégica.
De pedir misiles a escuchar propuestas de retirada
Zelenskiy viajó a Washington con un objetivo claro: conseguir misiles Tomahawk de largo alcance para lanzar una ofensiva contra posiciones rusas. Ucrania dispone de miles de drones listos para operar, pero necesita armamento avanzado para equilibrar el conflicto.
La respuesta de Trump fue tan fría como directa:
“Preferiríamos mucho más que no necesitaran Tomahawks”, declaró ante los medios.
En lugar de prometer armas, Trump instó a ambas partes a detener la guerra de inmediato, aunque eso suponga que Kiev ceda parte de su soberanía:
“Deténganse en la línea de batalla, y ambos bandos deberían irse a casa, con sus familias”, afirmó antes de volar a su residencia en Florida.
Un giro peligroso: más diplomacia con Putin, menos apoyo a Ucrania
Trump confirmó que espera reunirse próximamente con Vladimir Putin en Hungría, en un encuentro que ha despertado alarma entre los aliados europeos. El republicano ha decidido posicionarse como “mediador” entre Moscú y Kiev, pese a que Rusia fue quien invadió Ucrania en 2022.
“Creo que Zelenskiy quiere que se haga (la paz), y creo que Putin también. Solo tienen que llevarse un poco mejor”, dijo Trump con tono condescendiente.
Zelenskiy fue tajante:
“Nosotros queremos la paz. Putin no la quiere”.
Una rendición por etapas
La lectura en Kiev es clara: mientras Trump apuesta por congelar el frente y reducir el conflicto a un empate técnico, Moscú gana tiempo, refuerza posiciones y prepara la próxima ofensiva.
Este nuevo enfoque estadounidense podría marcar el fin del apoyo militar activo a Ucrania. De la promesa de misiles, tanques y defensa aérea, se ha pasado a las reuniones con Putin, los gestos de neutralidad y la presión para aceptar cesiones territoriales.
Riesgos para Europa y la OTAN
La decisión de Trump deja a Zelenskiy debilitado frente a una Rusia envalentonada. Además:
- Europa podría quedarse sola en el apoyo militar si EE. UU. se retira.
- La OTAN pierde fuerza disuasoria si uno de sus pilares promueve concesiones.
- Rusia logra legitimidad diplomática mientras mantiene la ocupación.
- Se consolida la idea de que el agresor puede negociar desde la fuerza.
¿Trump pacificador o aliado de Putin?
No es la primera vez que Trump muestra simpatía hacia Moscú. Lo preocupante es que ahora, como presidente, está dispuesto a condicionar el futuro de Ucrania y a dejar que el agresor imponga condiciones.
Mientras Zelenskiy pide defensa, Trump le ofrece retirada. Mientras Putin gana tiempo, Trump le ofrece una mesa de negociación.