
El IPC cae al 3% en noviembre, pero la inflación subyacente se eleva
¿Un respiro temporal en la economía española?
El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha registrado en noviembre su primera caída interanual desde mayo, moderándose hasta el 3%. Este descenso se atribuye principalmente a la bajada del precio de la electricidad, aunque el aumento de la inflation subyacente nos recuerda que la situación económica sigue siendo frágil.
El ominoso aumento de la inflación subyacente
A pesar de la caída en el IPC, la inflación subyacente, que excluye la energía y los alimentos no elaborados, ha subido una décima hasta el 2,6%. Este es el nivel más alto que hemos visto en 2024, algo que debería preocuparnos a todos los españoles y que pone de manifiesto la ineficacia de las políticas económicas actuales.
Con la nueva cifra, se proyecta que las pensiones subirán alrededor de un 2,7% el próximo año, situándose en unos 35 euros más de media al mes. Aunque es positivo que más de 9,4 millones de personas se verán beneficiadas, el aumento de la inflación subyacente señala que esta mejora podría ser efímera y no suficiente ante el creciente coste de la vida.



