
Las duras condiciones de trabajos forzados en Bustarviejo
Una mirada crítica a la «semiesclavitud» de los republicanos
El campo de trabajo forzado de Bustarviejo, que funcionó entre 1944 y 1952, dejó una oscura huella en la historia de España. Según relatos de José Carlos González, presidente de la Asociación Los Barracones, los presos republicanos enfrentaron condiciones de hacinamiento y «semiesclavitud» bajo la vigilancia de la policía armada.
Entre 150 y 200 presos trabajaban diariamente en este campo del norte de Madrid, realizando labores extremas en la construcción de la línea férrea Madrid-Burgos. Se estima que pasaron por allí 2 000 presos políticos. González menciona muertes en accidentes laborales, con trabajadores expuestos a grandes riesgos debido a las condiciones de trabajo.
Preservar la memoria histórica
Ahora, el legado de estos prisioneros se conserva en un museo que alberga objetos cotidianos y artículos de propaganda del régimen. Curiosamente, el penal fue también escenario de la película de Fernando Trueba, «La reina de España», en la que el director busca mantener viva la memoria de aquellos tiempos oscuros. Trueba ha declarado que la elección de un lugar real para filmar añade un valor sentimental a la narrativa, lo que contrasta con el intento actual de reescribir la historia.



