Clásico italiano delicado y aromático
Los ravioli de ricotta y limón con mantequilla de salvia son un plato italiano elegante y sutil, habitual en menús de alta cocina por su equilibrio entre cremosidad, frescor cítrico y aroma herbal. Funcionan porque el relleno es ligero, la pasta fresca aporta textura sedosa y la mantequilla aromatizada envuelve sin ocultar sabores. Es una receta ideal para una comida especial cuando se busca refinamiento sin salsas pesadas.
En la cocina italiana, menos es más. Este plato demuestra cómo pocos ingredientes, bien tratados, pueden crear una experiencia delicada y memorable, donde cada elemento tiene un propósito claro.
Ficha técnica del Ravioli de Ricotta y Limón
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 5 minutos
- Tiempo total: 35 minutos
- Porciones: 3
- Nivel de dificultad: Media
Ingredientes
- Pasta fresca para ravioli
- 250 g de ricotta
- Ralladura fina de limón (al gusto)
- Mantequilla de buena calidad
- Hojas de salvia fresca
- Sal
La ricotta debe ser cremosa y bien escurrida para un relleno ligero.
Elaboración paso a paso
- Mezcla la ricotta con una pizca de sal y la ralladura de limón hasta integrar.
- Extiende la pasta fresca y coloca pequeñas porciones de relleno, sin sobrecargar.
- Cierra los ravioli sellando bien los bordes.
- Cuece los ravioli en agua con sal durante 3–4 minutos, hasta que floten.
- En una sartén amplia, funde la mantequilla a fuego suave y añade las hojas de salvia hasta que perfumen.
- Escurre los ravioli y pásalos a la sartén, napándolos suavemente con la mantequilla aromatizada.
- Sirve de inmediato.
Consejos del chef
- La ralladura debe ser fina y solo de la parte amarilla para evitar amargor.
- Mantén el fuego bajo al aromatizar la mantequilla para no quemarla.
Errores comunes y cómo evitarlos
- Exceso de relleno: dificulta el sellado y rompe la pasta.
- Cocción prolongada: la pasta fresca se pasa rápidamente.
Cómo servir
Un toque final de ralladura de limón o unas hojas de salvia fresca realzan aroma y presentación.
Consejos
Una buena pasta fresca y una mantequilla de calidad marcan la diferencia en este plato. También ayuda una rueda cortapastas precisa para sellar bien los ravioli. Son básicos que elevan el resultado final y encajan con una cocina cuidada y funcional.
Variantes recomendadas
- Añade un poco de queso parmesano rallado fino al relleno.
- Incorpora nuez moscada muy sutil para un perfil más clásico.
- Sustituye la salvia por tomillo limón para una nota diferente.
Este plato resume la esencia de la cocina italiana contemporánea: respeto al producto, equilibrio y elegancia sin artificios. Servido caliente y al momento, es una experiencia que no necesita explicación.
