El técnico del Betis mantiene cautela ante mercado y fútbol competitivo
Manuel Pellegrini, entrenador del Real Betis, compareció antes del encuentro liguero frente al Athletic de Bilbao. Destacó que los partidos contra rivales de Champions League, como el Athletic, son siempre muy difíciles y subrayó la necesidad de competir con un partido completo de defensa a ataque para ganar.
Confirmó las novedades en la lista de convocados: Deossa, Marc Roca y Llorente, quienes ya cuentan con el alta médica. A la vez, Pellegrini fue contundente al hablar del mercado de fichajes: «Ya di mi opinión internamente en el club. Cuando el mercado cierre, valoraremos la plantilla».
Sobre el asunto de Antony, tema candente en medios internacionales, el técnico fue explícito: «Estoy igual que antes, ni optimista ni pesimista. El club intenta cerrar la operación, pero veremos si se puede o no».
¿Mercado frenético o falta de previsión?
En la línea editorial de «Zero Censura» resaltamos la ambigüedad de Pellegrini frente a rumores que desde Inglaterra dan por cerrado el fichaje de Antony. La gestión del Betis refleja una falta de transparencia para con la afición y genera dudas sobre la capacidad real del club para competir en una liga que exige plantilla sólida y planificación estratégica.
Respecto a las posibles salidas, Pellegrini advirtió que «cada baja deberá ser compensada», subrayando la actual precariedad del plantel que en realidad debería haber trabajado en refuerzos mucho antes. Es un hecho que las rotaciones y el cansancio afectan, y el técnico ya habla desde la queja sobre la planificación del calendario liguero.
Liderazgo y futuro joven en el Betis
Sobre el vestuario, Pellegrini destacó la importancia del liderazgo de Andrés Guardado, un perfil experimentado difícil de reemplazar. En cuanto a jóvenes como Pablo García y Deossa, confía en su crecimiento y adaptación, pero esto pone en evidencia una apuesta que puede resultar arriesgada si no se refuerzan posiciones clave.
Europa League y retos por delante
Finalmente, Pellegrini reconoce el desafío que supone disputar competiciones europeas como la Europa League, señalando la necesidad de un plantel competitivo para afrontar jornadas exigentes sin que el cansancio mermé el rendimiento. Sin embargo, la realidad del Betis muestra carencias que podrían limitar sus aspiraciones deportivas y financieras en un contexto cada vez más profesionalizado y exigente.
