En un golpe devastador, más de 190 personas han perdido la vida en las últimas 24 horas debido a lluvias extremas en Pakistán, mientras un helicóptero de rescate se estrelló este viernes en el norte del país, cobrando la vida de cinco tripulantes, incluidos dos pilotos.
Cifra y contexto dramático
La Autoridad Nacional de Gestión de Desastres (NDMA) reporta que al menos 189 personas murieron en la provincia noroeste de Khyber Pakhtunkhwa, un número que refleja el impacto más letal del inicio de la temporada de monzón en 2025. A este luctuoso saldo se añaden ocho fallecidos en Gilgit-Baltistán, sumando un total devastador regional.
El rescate que terminó en tragedia aérea
Mientras equipos de socorro desplegaban esfuerzos humanitarios, un helicóptero Mi-17 del gobierno provincial sufrió un accidente fatal en la región de Mohmand debido al severo mal tiempo. La aeronave transportaba ayuda al distrito de Bajaur cuando se estrelló, resultando en la muerte de sus cinco tripulantes, dos de ellos pilotos. Este episodio refuerza las dificultades que enfrentan las misiones de auxilio en medio del caos climático.
Impacto por distritos: cifras escalofriantes
La provincia de Khyber Pakhtunkhwa ha sido la zona más afectada, con 155 víctimas en diversas tragedias como inundaciones repentinas, deslizamientos, rayos y aludes.
En particular, el distrito de Buner registró 91 muertes, el balance más elevado de la provincia.
En regiones como Bajaur, Battagram, Mansehra, Shangla, Swat y Lower Dir, se confirmaron decenas de víctimas adicionales, incluidos hombres, mujeres y niños.
Gilgit-Baltistán no quedó exento: se registraron 10 muertes, mientras que en la Cachemira administrada por Pakistán fallecieron 8 personas, entre ellas seis miembros de una misma familia.
Respuesta estatal y comunidad con luto nacional
Frente a esta emergencia sin precedentes, el Ejército pakistaní, las autoridades provinciales, servicios de rescate (como Rescue 1122) y voluntarios intervienen sin descanso.
Se ha declarado un día de luto nacional y se ordenaron banderas a media asta en todo el país como muestra de duelo y solidaridad.
¿Historia que se repite?
Las lluvias monzónicas fatídicas no son una novedad en Pakistán. En 2022, lluvias e inundaciones record dejaron más de 1 700 muertos y pérdidas valoradas en miles de millones de dólares. Las alertas por cambio climático, deforestación y obras sin planificación se han intensificado en cada temporada, aunque sin medidas preventivas efectivas.
Este año, desde finales de junio, se contabilizan ya más de 480 muertes relacionadas con lluvias en todo el país. El escenario actual en agosto solo confirma que, pese a las tragedias sin fin, la provincia sigue atrapada en un ciclo devastador.



