
Moldavia da un giro proeuropeo: PAS refuerza su poder en elecciones
Victory del PAS marca un futuro con Bruselas
Los proeuropeos han ganado las elecciones parlamentarias moldavas de este domingo, en unos comicios considerados decisivos para el rumbo del país. El partido de la presidenta Maia Sandu, Acción Solidaria (PAS), ha alcanzado un 48% de los votos, asegurando así la mayoría absoluta que ya ostentaban. Este triunfo les permite mantener a Chisináu alejado de la órbita de Moscú y continuar su proceso de integración en la Unión Europea.
La oposición rinde homenaje a Dodon y las sombras de Moscú
Por el contrario, el Bloque Electoral Patriótico (BEP), alineado con Rusia, se ha consolidado como una fuerza opositora, logrando un 25%. Mientras tanto, el expresidente Igor Dodon, líder del BEP, se ha autoproclamado «vencedor», desafiando los resultados y pidiendo una manifestación para «defender el voto ciudadano». Esto plantea serias interrogantes sobre la legitimidad de los procesos electorales en Moldavia y la posible injerencia del Kremlin.
Polarización nacional y desafíos internos
A pesar del éxito del PAS, el partido ha perdido terreno desde 2021, impulsado por las dificultades económicas en este país, una de las zonas más pobres de Europa. Moldavia, antigua república soviética de 2,4 millones de habitantes, se enfrenta a la polarización interna provocada por la crisis en Ucrania, la escasez de energía, y la defensa de la identidad nacional frente a la presión prorrusa.
Desinformación y ciberataques
Las elecciones estuvieron marcadas por la alta participación ciudadana. Más de 1,6 millones de personas votaron en el país, y más de 270 000 moldavos en el extranjero. Sin embargo, la jornada también registró intentos de ciberataques a la infraestructura electoral, indicando que la injerencia rusa sigue siendo una preocupación crítica en el país.