El Gran Premio de MotoGP en Balaton Park dejó una imagen clara: el dominio incontestable de Marc Márquez, que sumó su victoria número 23 de 28 posibles esta temporada, y el resurgir de Pedro Acosta, quien consiguió una brillante segunda plaza, su mejor resultado del año.

Márquez, intratable una vez más
Márquez volvió a imponer su ley en una carrera que lideró a placer tras once vueltas. Pese a un arranque en el que fue superado por Marco Bezzecchi, el piloto español no tardó en recuperar el liderato, adelantando primero a Marini, luego a Morbidelli y finalmente al italiano de Aprilia en el inicio de la vuelta 11. Desde entonces, voló en solitario hasta la meta, ampliando su ventaja en el campeonato a 175 puntos sobre Álex Márquez, que solo pudo ser 14º tras una caída.
Este triunfo supone su séptimo doblete consecutivo, el décimo del año y lo acerca cada vez más a un nuevo título, que podría certificar matemáticamente en Misano, si en Montmeló suma al menos 10 puntos más sobre su hermano.
El mejor Acosta del año
Pedro Acosta firmó una actuación impecable partiendo desde la séptima posición. El piloto de KTM mostró ritmo, agresividad y consistencia para llegar hasta la segunda plaza. Es la versión que muchos esperaban desde el inicio del curso, y todo apunta a que seguirá creciendo a medida que la moto mejore. Sin duda, un impulso anímico clave para “El Tiburón”.
Remontada espectacular de Jorge Martín
Quien también brilló fue Jorge Martín, que arrancó 16º y finalizó cuarto, ganando 12 posiciones. El piloto de Aprilia empieza a recuperar sensaciones tras sus percances físicos y ya recuerda al campeón del año pasado y subcampeón hace dos temporadas. Junto a Bezzecchi, forma una pareja prometedora para el equipo.
Una carrera estratégica y decisiva
Aunque no fue la carrera más vibrante del año por las múltiples chicanes del trazado húngaro, el resultado sí dejó lecturas importantes de cara al tramo final del campeonato. Marc Márquez está imparable, Pedro Acosta empieza a mostrar su verdadero potencial y Martinator recupera terreno.
Con Misano en el horizonte, MotoGP se prepara para un desenlace apasionante con el octacampeón rozando otra corona y nuevas figuras pujando por el protagonismo.