
Marko Dmitrovic y el lastre defensivo que amenaza al Espanyol
El guardameta serbio, clave en la caída del equipo en la Liga
El Espanyol ha vivido un declive alarmante: sumó 12 puntos en sus primeros cuatro partidos, pero apenas 2 puntos en los cuatro siguientes. Más que el calendario, dos factores explican esta caída. Primero, la falta de eficacia ofensiva, anotando tan solo tres goles en 55 remates contra Valencia, Girona y Betis. Segundo, una crisis defensiva que afecta directamente al portero Marko Dmitrovic.
Una portería que no se cierra y las consecuencias
Manolo González, entrenador del Espanyol, lanzó una advertencia tajante tras perder contra el Betis: «O cerramos la portería o tendremos un problema«. Los números son contundentes: solo tres disparos entre los tres palos del Betis resultaron en dos goles. Contra Valencia fue peor: dos disparos, dos goles. Estas cifras evidencian un fallo defensivo estructural, con Dmitrovic en el centro de la crítica.
Doctor Marko vs Mister Dmitrovic: dos caras en una temporada
En las primeras cuatro jornadas, frente al Atlético, Real Sociedad, Osasuna y Mallorca, Dmitrovic detuvo 19 de 24 tiros (un extraordinario 79,16% de eficacia). Sin embargo, en las siguientes cuatro, su porcentaje cayó a un preocupante 53,8% tras recibir solo 13 disparos pero encajando seis goles. Esta bajada evidencia problemas de concentración o liderazgo en la defensa, un lujo que un equipo que aspira a la élite no puede permitirse.
¿Por qué esta crisis? Análisis y contexto
Dmitrovic, con un rendimiento global del 70,2% en paradas esta temporada, sigue siendo un portero competente, incluso por encima de su media histórica en Primera (64,66%). Pero esta diferencia abismal entre un «Doctor Marko» imbatible y un «Mister Dmitrovic» titubeante abre dudas sobre la estabilidad defensiva y la gestión técnica del Espanyol. El equipo debe encontrar soluciones urgentes antes del próximo partido para evitar que esta crisis se prolongue.



