
Iñigo Pérez: «Cuando la derrota duele más, hay que reaccionar rápido»
Reflexiones tras una derrota ajustada y la gestión de la presión en el Rayo Vallecano
El entrenador Iñigo Pérez ha respondido con contundencia tras la derrota reciente que ha golpeado al Rayo Vallecano. «Cuando lo ves tan cerca duele más», afirmó, dejando claro que el golpe negativo es inevitable pero que la reacción debe ser inmediata: «Quedará la derrota. Hay que limpiarnos lo antes posible de esta suciedad que tenemos ahora dentro y a pensar en el Sevilla».
Gestión táctica y física en una temporada exigente
Sobre el planteamiento táctico, Pérez admitió que «en la primera parte nos superaron tácticamente, pero en la segunda ajustamos detalles y dimos una mejor versión». También señaló la importancia de una adecuada rotación de jugadores y la necesidad de controlar la carga física para afrontar un ritmo frenético: «Ni estando perfecto puedes aguantar ese ritmo a nivel físico y técnico».
Controversias arbitrales y postura de la dirección técnica
En relación a las decisiones arbitrales polémicas, el entrenador se mostró reservado y no quiso opinar, a pesar de protestas en el campo: «No opino de las decisiones arbitrales. Mi decisión no es contagiosa ni extenso al resto. No vamos a recuperar nada y mantengo la calma para no hacer el ridículo aquí». Una postura que genera debate sobre la falta de valentía para confrontar injusticias en el deporte.
El papel clave de Julián Alvarez y el futuro del equipo
Pérez reconoció la influencia decisiva de Julián Alvarez, comparando su impacto en ambos clubes y lamentando no haber encontrado solución ante su calidad. Asimismo, destacó la confianza total en la plantilla y el valor de jugadores clave como Álvaro, alabando no solo sus logros sino su profesionalismo y liderazgo dentro del vestuario.
Temas para la reflexión desde una perspectiva crítica
Esta derrota pone sobre la mesa la necesidad de una gestión más rigurosa en el arbitraje y una mayor valentía para cuestionar decisiones que afectan a equipos con menos recursos como el Rayo Vallecano. Además, plantea la conveniencia de un debate profundo sobre las rotaciones y la inversión en plantillas que puedan sostener exigencias europeas y nacionales sin desarmarse en el proceso.



