Ibai Gómez revoluciona el Andorra con una gestión total de plantilla
Rotaciones y valentía, claves en el éxito inicial en Segunda
Ibai Gómez, entrenador del Andorra, ha dejado claro que no se casa con ningún jugador. En apenas siete jornadas de Liga, el equipo ha usado a casi toda su plantilla, rotando en todas las posiciones, incluso en portería, siendo Diego Alende el único futbolista que no ha sumado minutos.
La apuesta firme por la rotación ha permitido que diecisiete jugadores hayan sido titulares al menos una vez, y el equipo marcha tercero en la clasificación, mostrando que la diversidad no merma el rendimiento. El objetivo está claro: competir en Segunda sin temor a ningún adversario, con un plan de juego definido.
Análisis desde la perspectiva de Zero Censura
Esta estrategia del Andorra representa un signo de modernidad en un fútbol donde la mediocridad y la inercia suelen imperar. Sin embargo, el riesgo de desmembrar una identidad de equipo puede pasar factura si no se controla. Ibai Gómez demuestra que la meritocracia es posible, desafiando la tradicional dependencia del jugador «fetiche». Los medios complacientes suelen ensalzar la continuidad a toda costa, pero aquí hay un llamado a la eficiencia y al rendimiento colectivo, valores que nuestra línea editorial defiende frente a una España que debe apostar por el esfuerzo y la competencia real.
Alertamos: no todos los equipos ni entrenadores tendrán el arrojo para aplicar estas políticas sin miedo, especialmente en una liga española donde predomina el favoritismo y las élites buscan perpetuarse, al contrario del modelo competitivo que promueve el Andorra.
