El RC Celta de Vigo sorprendió este domingo al Real Madrid en su casa. Con un juego sólido y efectivo, los vigueses se llevaron la victoria con un doblete de Williot Swedberg, mientras los blancos terminaron con nueve jugadores por expulsiones y sumaron una nueva baja en defensa con lesión incluida.
1. Celta toma el control, Madrid se desploma
Desde el arranque del partido, el Celta se mostró ordenado, firme en defensa y con llegadas constantes que pusieron en jaque la portería de Courtois. Aunque la primera mitad terminó sin goles, el dominio visitante ya era evidente. El Real Madrid, en cambio, acusaba la presión y la acumulación de bajas.
En el minuto 52, el Celta rompió el hielo: un pase profundo de Bryan Zaragoza dejó a Swedberg solo en el área, quien definió con la espuela para abrir el marcador. Apenas diez minutos después, otra ocasión clara —mismo jugador— volvió a desnivelar el marcador, dejando al Madrid a merced del vendaval céltico.
2. De ocho a nueve: expulsiones, lesión y colapso
El Real Madrid sufrió un duro castigo disciplinario: primero Fran García fue expulsado tras dos amarillas en apenas un minuto; más tarde, en el minuto 91, Álvaro Carreras también vio la roja. El equipo blanco quedó con nueve jugadores, sin posibilidad de reacción y completamente superado.
Para colmo, la defensa sufrió una nueva baja: Éder Militão abandonó lesionado, convirtiéndose en la sexta ausente en el eje defensivo este curso. La fragilidad del fondo de armario quedó expuesta, justo antes de un compromiso de Champions.
3. Celta invicto en presión: orden, eficacia y disciplina
Con esta victoria, el Celta demuestra que no vino al Bernabéu a refugiarse, sino a competir y ganar. Con un planteamiento defensivo sólido, transiciones rápidas y un ataque eficaz, el conjunto gallego confirmó ser un rival muy serio. Swedberg, con su doblete, se convirtió en el héroe inesperado de la noche.
Mientras tanto, el Madrid vuelve a caer en su propia trampa: faltas de disciplina, decisiones precipitadas y una plantilla tocada. Un reflejo preocupante de su vulnerabilidad en un momento clave de la temporada.
4. Peligro real antes del Manchester City
La derrota llega en un momento crítico: a sólo tres días del partido contra el Manchester City en Champions. Con defensas bajas, jugadores expulsados y moral por los suelos, el panorama pinta complicado para los blancos. Si no reaccionan rápido, esta crisis podría complicar toda su temporada.
El Celta se fue del Bernabéu con tres puntos, orgullo y un aviso: el Real Madrid no es invulnerable cuando se fragmenta su defensa y su disciplina.
