Washington presiona a España tras el compromiso firmado en la última cumbre de la OTAN

El Gobierno de Estados Unidos ha recordado este domingo al Ejecutivo de Pedro Sánchez que España se comprometió formalmente a elevar su gasto en Defensa hasta el 5% del PIB en 2035, en virtud del acuerdo firmado por todos los Estados miembro de la OTAN en la última cumbre.
Pese a que Sánchez ha reiterado públicamente que España no superará el 2% del PIB en gasto militar, la Administración Trump insiste en que ese compromiso es vinculante y que su incumplimiento tendría “graves consecuencias”.
El aviso de Washington
Un portavoz del Departamento de Estado norteamericano, en declaraciones a Europa Press, fue tajante:
“Todos los Estados firmaron el compromiso del 5%. España no es una excepción. Si se niega a cumplir, habrá graves consecuencias”.
Estas declaraciones se producen días después de que la Casa Blanca reconociera como un “primer paso positivo” que España haya alcanzado por primera vez el umbral del 2% del PIB en gasto en Defensa. Sin embargo, para Washington la cifra sigue siendo insuficiente.
El embajador de Estados Unidos ante la OTAN, Matt Whitaker, también advirtió que los países que no cumplan podrían acabar pagando el doble en intereses como consecuencia de retrasar las inversiones militares. El propio Trump reforzó esta amenaza asegurando que “si España no llega al 5%, tendrá que pagar mucho más de lo estimado”.
El objetivo: una Europa más autónoma
La Administración estadounidense defiende que el aumento del gasto es “un paso clave para incrementar la letalidad y garantizar que Europa pueda protegerse por sí sola frente a las amenazas del siglo XXI”.
Según la OTAN, todos los países aliados, incluida España, ya alcanzarán el 2% este 2025. El reto ahora es elevar la inversión de manera gradual hasta el 5% en 2035.
La posición del Gobierno español
El Ejecutivo de Sánchez ha diseñado un plan de inversión militar centrado únicamente en llegar al 2%. Dicho plan se presentó en el Congreso sin votación, ante la falta de apoyo de sus socios de gobierno a cualquier incremento de gasto en Defensa.
El plan contempla contratos por más de 800 millones de euros destinados a modernizar las Fuerzas Armadas, pero no plantea subidas adicionales para acercarse al 5%.
En este escenario, fuentes gubernamentales reconocen que será muy difícil que España cumpla con el objetivo exigido por Washington en los próximos meses, lo que anticipa un nuevo foco de fricción diplomática con la Administración Trump.