El primer ministro canadiense Mark Carney anuncia el reconocimiento de Palestina en la ONU para septiembre, desafiando a Israel y a su histórico aliado, EE.UU., en medio de la hambruna y la devastación en Gaza.
Canadá se une a Francia y Reino Unido en la presión internacional
El primer ministro de Canadá, Mark Carney, confirmó que su país reconocerá al Estado palestino durante la próxima Asamblea General de la ONU en septiembre, si Israel no detiene los combates en Gaza. La decisión sigue los pasos de Francia y Reino Unido, que también se han alineado para presionar diplomáticamente a Israel.
Carney justificó el reconocimiento afirmando que «la perspectiva de un Estado palestino está literalmente desapareciendo ante nuestros ojos», debido a la catástrofe humanitaria en Gaza, donde la hambruna y la devastación avanzan sin freno. El anuncio llega justo cuando un informe internacional alerta de una hambruna catastrófica en el enclave, con más de 150 muertes por hambre, incluyendo al menos 89 niños.
Reacciones furiosas desde Tel Aviv y Washington
La respuesta israelí fue inmediata y hostil. El Gobierno de Benjamín Netanyahu acusó a Canadá de «recompensar a Hamás» y de entorpecer los esfuerzos para un alto el fuego. Estados Unidos, a través de un portavoz de la Casa Blanca, respaldó a Israel y afirmó que la decisión canadiense era una «recompensa errónea» que legitima a una organización terrorista.
Desde Jerusalén, miembros del gabinete de seguridad israelí incluso amenazaron con anexar partes de Gaza, lo que dinamitaría cualquier posibilidad futura de un Estado palestino. Mientras tanto, el presidente Donald Trump envía a su enviado especial, Steve Witkoff, a la región, intentando contener una crisis diplomática que se amplía.
Un nuevo frente diplomático: Palestina como símbolo de ruptura occidental
El reconocimiento de Palestina por parte de potencias occidentales representa una fractura evidente en el apoyo incondicional a Israel, tradicional en países del G7. Más de 140 naciones ya reconocen formalmente a Palestina como Estado, y esta ola diplomática podría abrir un nuevo capítulo en el conflicto de Oriente Medio.
A pesar de que algunos analistas ven el gesto como meramente simbólico, otros alertan que esta escalada diplomática puede aislar aún más a Israel en la arena internacional, especialmente si continúa con su campaña militar que ya ha causado más de 60 000 muertos en Gaza, según cifras locales.
La Autoridad Palestina promete elecciones sin Hamás
Canadá condiciona su reconocimiento a reformas en la Autoridad Palestina, que se ha comprometido a convocar elecciones generales en 2026, excluyendo a Hamás de cualquier participación. Esto podría interpretarse como un intento de forzar una transición política interna palestina bajo presión internacional.
El movimiento ha sido recibido con esperanza por parte de residentes palestinos, quienes ven en este respaldo internacional «un cambio real». Sin embargo, familias israelíes con rehenes aún en Gaza lo consideran una traición.
Netanyahu cierra la puerta a la paz
Mientras el mundo presiona por una solución diplomática, Netanyahu advierte que nunca permitirá un Estado palestino con control total sobre su seguridad. Su gabinete, que incluye ministros de extrema derecha como Bezalel Smotrich, sigue promoviendo la anexión total del territorio palestino, incluso con el restablecimiento de asentamientos judíos en Gaza.
El contraste entre el aislamiento internacional de Israel y el creciente respaldo global a Palestina marca un punto de inflexión en la geopolítica del conflicto.