
Bizcocho clásico, húmedo y perfecto para aprovechar plátanos maduros
El banana bread es un bizcocho tradicional estadounidense, ideal para aprovechar plátanos muy maduros y transformarlos en un postre aromático, jugoso y fácil de preparar. Su popularidad se debe a que no requiere técnicas complejas, admite múltiples variaciones y se conserva bien varios días. Es perfecto para desayunos, meriendas o como bizcocho casero de fondo de nevera.
Ficha técnica
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: 50 minutos
- Tiempo total: 1 hora
- Porciones: 8 rebanadas
- Nivel de dificultad: Fácil
Ingredientes
- 3 plátanos muy maduros
- 2 huevos
- 100 g de azúcar o panela
- 80 g de mantequilla derretida
- 200 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Cuanto más maduros estén los plátanos, más dulce y aromático quedará el bizcocho.
Elaboración paso a paso
- Precalienta el horno a 180 °C, calor arriba y abajo.
- Pela y tritura los plátanos hasta obtener un puré.
- Añade los huevos, la mantequilla derretida, el azúcar y la vainilla. Mezcla bien.
- Incorpora la harina y la levadura tamizadas, integrando sin batir en exceso.
- Vierte la mezcla en un molde engrasado o forrado con papel de horno.
- Hornea durante 50 minutos, o hasta que al pinchar salga limpio.
- Deja templar 10 minutos antes de desmoldar.
Consejos y sugerencias
Toques extra
- Añade nueces, almendras o chips de chocolate para aportar textura.
- Una pizca de canela o nuez moscada intensifica el aroma.
Errores comunes
- Batir en exceso: endurece el bizcocho. Mezcla solo hasta integrar.
- Plátanos poco maduros: restan sabor y humedad.
Conservación
- Aguanta 3–4 días bien tapado a temperatura ambiente.
- Se puede congelar en rebanadas y descongelar a temperatura ambiente.
Variante más saludable
Sustituye el azúcar por panela o azúcar de coco, y usa harina integral en un 50 %. El resultado es más saciante y mantiene la jugosidad.
Cierre editorial
El banana bread demuestra que la repostería casera no necesita complicarse para funcionar. Aprovecha lo que ya tienes, respeta las proporciones y obtendrás un clásico que nunca falla, generación tras generación.



