Este jueves, el cielo de algunas regiones de España se tiñó con los tonos verdes, naranjas y rojos característicos de una aurora boreal, un fenómeno poco habitual en latitudes tan meridionales que ha sido posible gracias a una potente tormenta solar que incrementó la actividad geomagnética.
La Agencia Espacial Europea (ESA) emitió una alerta por lo que calificó como una “severa” tormenta solar, advirtiendo de posibles alteraciones en redes eléctricas, tuberías y satélites —y también de la ocasión excepcional para ver auroras desde España.

Dónde se han observado
- En el Parc Astronòmic de Prades (Tarragona) se filmó una aurora SAR —stable aurora red arch— alrededor de las 6:00 h de la mañana del jueves, coincidiendo con el pico de actividad.
- En el Observatorio de Calar Alto (Almería) se registró una de las auroras más brillantes vistas en la región, tras dos importantes erupciones solares que enviaron densas nubes de partículas energéticas. El cielo incluso lució rojizo durante varias horas.
- También se reportaron avistamientos desde zonas de la Comunidad Valenciana, Aragón y Galicia, lo que confirma que el fenómeno ha tenido alcance en amplias zonas de la península.
¿Por qué se producen y por qué se vieron desde España?
Las auroras boreales son habituales en altas latitudes, cerca del Ártico, donde el viento solar choca con el campo magnético terrestre. Pero cuando se produce una tormenta geomagnética de gran intensidad, estas luces pueden observarse también en latitudes medias.
En este caso, las erupciones solares lanzaron una gran cantidad de partículas que interactuaron con la atmósfera terrestre generando las tonalidades verdes y rojas que se observaron en España.

Consejos para verlas
Para contemplar auroras desde la península:
- Alejarse de la contaminación lumínica, buscar cielos oscuros en horas de madrugada.
- Vigilar alertas de actividad solar y geomagnética; cuando la tormenta es fuerte, las posibilidades aumentan.
- Tener buena disposición para captar el fenómeno, ya que su duración y visibilidad pueden ser breves.
Aunque estas auroras son un espectáculo visual, los reportes de la ESA recuerdan que también es importante prestar atención a posibles alteraciones en redes eléctricas o comunicaciones, aspecto menos visible pero relevante.



