La esposa de Pedro Sánchez suma una nueva imputación, esta vez por malversación, tras destaparse el uso de recursos públicos en beneficio de sus negocios privados.
El teléfono de Moncloa al servicio de la cátedra
La investigación judicial sobre Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, sigue acumulando capítulos comprometedores. Según los correos incorporados al sumario del “caso Begoña”, su asesora en La Moncloa, Cristina Álvarez, utilizó su móvil oficial de Presidencia para contactar con empresas vinculadas a la cátedra que dirigía Gómez en la Universidad Complutense.
Los mensajes enviados a compañías como Indra, Telefónica, Google Spain, Fundación La Caixa, Reale Seguros o la Fundación Manpower incluían el número de teléfono asignado a Álvarez como directora de Programas de la Presidencia del Gobierno, es decir, un recurso costeado con dinero público.
El juez rastrea llamadas a patrocinadores
El magistrado Juan Carlos Peinado ha ordenado a la UCO de la Guardia Civil investigar el tráfico de llamadas de la asesora, para comprobar si se coordinó con los patrocinadores de los másteres y cátedras de Gómez, así como con el empresario Juan Carlos Barrabés, pieza clave del caso.
En julio, Moncloa remitió al juez las líneas de telefonía asignadas a la asesora, que ya están bajo análisis de la Guardia Civil.
Nueva imputación contra Begoña Gómez
El uso de recursos de la Presidencia ha llevado a que Gómez sume su quinta imputación, ahora por malversación, además de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida e intrusismo. La esposa del presidente está citada a declarar el 11 de septiembre, un día después lo hará su asesora, también imputada.
El juez recuerda que incluso hay correos donde Álvarez se dirigía a patrocinadores como “colaboradora de la cátedra”, o pedía directamente la continuidad de empresas como Reale Seguros, funciones que exceden con claridad su papel en Moncloa.
Una contratación “a dedo” y sin concurso
Cristina Álvarez reconoció que fue la propia Begoña Gómez quien la llamó en 2018, tras la llegada de Sánchez al poder, para ofrecerle el cargo. No hubo concurso ni selección pública: su puesto se trató de un nombramiento de confianza, que según el juez habría servido para poner a disposición de Gómez recursos públicos para sus negocios privados.
Incluso el ex vicerrector de la Complutense, Juan Carlos Doadrio, declaró que mantenía abundante comunicación con Gómez a través de su asistenta, a la que calificó como “persona de confianza”.
Bolaños se desmarca
En el marco de esta pieza separada, el juez Peinado citó al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, quien negó cualquier responsabilidad sobre la asesora.
Con esta nueva imputación, el caso Begoña se consolida como uno de los mayores escándalos de la historia reciente de Moncloa, al apuntar directamente a la utilización de los recursos de Presidencia en beneficio de negocios privados de la esposa del jefe del Ejecutivo.
