
Ibai Gómez intenta salvar al Andorra tras nueva mala racha
El Andorra se mueve entre la presión y la esperanza en Segunda División
Tras acumular siete partidos sin ganar, el Andorra encara un momento crítico. Actualmente, el equipo suma 17 puntos en 14 jornadas, apenas un punto más que en la temporada 2023-24 bajo Eder Sarabia, cuando se acabó con cambios y descenso. A pesar de la adversidad, el club se mantiene con dos puntos de margen sobre el descenso, una realidad que muchos equipos considerarían incluso un privilegio.
Un análisis desde la derecha española
El discurso optimista de Ibai Gómez calificando la plantilla como «muy buena» choca con la realidad de resultados que evidencian problemas estructurales. La mala actuación en la Segunda División no solo pone en entredicho la gestión deportiva, sino que refleja un techo bajo que incluso en la temporada de Sarabia no se logró superar. Este persistente fracaso podría estar afectado por una gestión que, en la práctica, no logra consolidar un proyecto sólido, lo que genera polémica sobre la capacidad real del club y sus dirigentes. Mientras tanto, la afición y la prensa empiezan a cuestionar si la presión política y mediática ha influido en la fragilidad del equipo, en un contexto donde las exigencias invertidas desestabilizan un proyecto que debería enfocarse en la excelencia y no en el victimismo.



