Los Tres Indispensables de Almada en el Real Valladolid

La solidez defensiva que sostiene al equipo en Segunda División

En el Real Valladolid, solo tres jugadores han disputado todos los minutos de los ocho partidos disputados hasta ahora en Liga: el portero Guilherme y los centrales Pablo Tomeo y David Torres. Este trío forma la columna vertebral del equipo dirigido por Almada, demostrando ser piezas imprescindibles para la estabilidad defensiva. Además, el lateral derecho Iván Alejo también ha sido titular en todos los encuentros, aunque no ha completado todos los minutos.

El valor de la seguridad en un contexto lleno de incertidumbres

Guilherme ha sido determinante bajo palos y ha marcado distancias sobre el joven portero Aceves, siendo reconocido como mejor jugador del mes de septiembre por la afición blanquivioleta. Sin embargo, su desempeño ha sufrido por la débil protección defensiva que le ha expuesto a tantos inevitables en las últimas jornadas. Por su parte, Pablo Tomeo, con una enorme progresión, ha mejorado notablemente la defensa y ha aportado incluso en ataque, como en su asistencia para un gol contra el Mirandés. David Torres, canterano que pasó de estar en la rampa de salida a pieza clave, destaca por su rendimiento defensivo y su versatilidad en el avance del balón.

Contextualizando desde una óptica crítica

A pesar de la claridad que dan estas figuras, el Real Valladolid refleja las falencias de la planificación deportiva y el débil entramado de un proyecto que no ha esperado a consolidarse. El énfasis en tener jugadores fiables en la base muestra la incapacidad para fichar talento que garantice un salto real de calidad. Más aún, la dependencia casi exclusiva de estos tres jugadores en una defensa saneada pone en evidencia una previsible fractura estructural si alguno de ellos sufre baja médica o pérdida de forma. La gestión de Almada y el cuerpo técnico debe plantearse cómo mitigar riesgos y atacar el problema desde la dirección técnica y ejecutiva, evitando que la falta de recursos repercuta en el rendimiento colectivo y, por ende, en la permanencia en Segunda División.