
El apagón eléctrico del 28 de abril: advertencia sobre la red eléctrica
Una cascada de sobrevoltaje, no solo el efecto de las renovables
El apagón total vivido en España y Portugal el pasado 28 de abril se debió a una «cascada de sobrevoltaje» iniciada en el sur de España, provocando consecuencias catastróficas en ambos países. Según el panel de expertos del Red Europea de Gestores de Redes de Transporte de Electricidad (ENTSO-E), el incidente, clasificado como el más grave en más de 20 años, fue resultado de múltiples factores críticos.
Factores críticos que llevaron al colapso
La desconexión repentina de instalaciones renovables, junto a bruscos aumentos de tensión y cortes en las interconexiones con Marruecos y Francia, destacaron en el informe. La falta de capacidad de regulación fue el detonante de este incidente multifactorial, evidenciando las carencias en un sistema que depende de un creciente uso de fuentes de energía verde. El presidente de ENTSO-E, Damián Cortinas, aseguró que «el problema aquí no es que hubiera renovables, sino que necesitamos generación que tenga control de voltaje».
El análisis futuro incluirá recomendaciones para prevenir incidentes similares en España, Portugal y el sistema eléctrico europeo, pero la realidad muestra que este tipo de apagón es algo nunca visto en Europa, un llamado de atención que no puede ser ignorado.