Uber Eats recupera su proyecto de envíos con drones en Estados Unidos tras asociarse con la startup israelí Flytrex, pionera en logística aérea. La compañía busca recuperar terreno en innovación frente a sus rivales.

Una apuesta tecnológica que regresa
Uber anunció que a finales de este año reanudará las pruebas de entrega con drones en algunos mercados de Estados Unidos. La iniciativa forma parte de un acuerdo con Flytrex, que incluye además una pequeña inversión de Uber en la empresa israelí, aunque sin un monto significativo.
La compañía ya experimentó con drones en 2019 para Uber Eats, pero abandonó el proyecto debido a las limitaciones regulatorias y terminó vendiendo su división aérea “Elevate” a Joby Aviation, especializada en taxis voladores.
Nuevo marco regulatorio y más competencia
El retorno de Uber al reparto con drones se produce en un momento clave:
- La regulación aérea en EE. UU. comienza a flexibilizarse, lo que abre la puerta a nuevos tipos de aeronaves comerciales.
- Empresas como Zipline ya han integrado con éxito el reparto aéreo en varias ciudades.
- Flytrex, socio de Uber, asegura haber realizado más de 200 000 entregas con drones en Estados Unidos y también colabora con DoorDash, competidor directo de Uber Eats.
Uber diversifica su estrategia en movilidad
Este movimiento forma parte de una estrategia más amplia:
- Uber ya colabora con Waymo en viajes autónomos en ciudades como Atlanta.
- El objetivo de la compañía es incorporar taxis aéreos eléctricos a su plataforma en los próximos años.
- Con la alianza con Flytrex, Uber busca posicionarse de nuevo en el reparto del futuro, evitando quedarse atrás en innovación tecnológica.
El regreso de Uber a los drones plantea interrogantes:
- ¿Será la logística aérea una solución real al reparto urbano o una simple estrategia de marketing?
- ¿Podrán las ciudades adaptarse a la presencia masiva de drones sin generar problemas de seguridad y privacidad?
- Mientras tanto, la carrera por dominar el reparto aéreo está servida y Uber no quiere perder la oportunidad.